El manga de Akira y el largometraje de animación, firmado por Katsuhiro Otomo, se han convertido en un auténtico icono de la cultura pop mundial. Varias décadas más tarde continua siendo una de las influencias más importantes en el mundo de la ilustración, el diseño y el cine, por citar solo algunas. El hecho de que el propio Katsuhiro dé carta blanca a los creadores para hacer y deshacer a su antojo en este basto universo también es un factor a tener en cuenta a la hora de observar el ascenso del film a la categoría de obra de culto.
Su historia, la narrativa, el dinamismo de las secuencias y los avances tecnológicos con los que fue desarrollada durante su época, le han valido el reconocimiento como obra de culto cinematográfica e indiscutible pilar de la animación japonesa. Y eso es lo que han hecho Ash Thorp y Zaoeyo, dos diseñadores nipones que han creado su personal homenaje a la obra de Katsuhiro. Awaken Akira es un claro ejemplo de la reinvención de un clásico llevada a cabo por sus propios fans.
La producción tomó más de un año de realización, ya que sus creadores tuvieron que coordinar tiempo y esfuerzo para la concepción de la idea y para llevar a cabo el gran reto: la reconstrucción de las locaciones más representativas de la cinta con gráficos en CGI. De hecho, dentro del sitio oficial de Awaken Akira puede verse todo el proceso de realización en el que han compartido todo tipo de bocetos y los archivos usados en Cinema 4D y After Effects. Incluso hay pequeñas anotaciones en las que cuentan cómo tuvieron que recurrir a tutoriales en línea y artículos de Wikipedia para poder aprender detalles de edición específicos, aunado a los primeros resultados, fotografías de su set y la revelación de haber usado fluidos orgánicos para el proyecto.
Sé el primero en comentar