Byton, una nueva marca creada por ejecutivos de BMW y Nissan, ha utilizado el CES de Las Vegas –Consumer Electronic Show– para mostrar lo que será un futuro SUV eléctrico. Se espera que su comercialización se inicie en Europa en 2020 y ofrezca, según la propia compañía, un espacio y una habitabilidad similares a las de un Mercedes Clase S. De momento, la tecnología es su seña de identidad.
El Byton Concept tiene unas dimensiones similares a las de un SUV de tamaño medio, con 4,66 metros de largo, aunque desde la marca aseguran que su espacio interior será similar a cualquier modelo de representación. Presenta un diseño exterior elegante, aunque destaca en su imagen su poderoso frontal con un musculado paragolpes. La parrilla se adapta a las formas de sus finas ópticas LED, mismo diseño que también presentan los grupos ópticos en su zaga. Con una líneas de diseño realmente marcadas y una atractiva caída del techo derivada del diseño de su Pilar C, en su vista lateral se puede apreciar la falta de retrovisores convencionales.
Byton no ha dado grandes pista sobre el tren motriz eléctrico que equipará su SUV, pero si que ha desvelado que su crossover podrá recorrer unos 400 kilómetros en su especificación de serie. Su sistema de baterías permitirá una carga equivalente a una autonomía de 240 kilómetros en apenas 20 minutos. Además, tendrá un sistema de carga rápida que permitirá recargar el 80% de su capacidad en tan sólo 30 minutos. Sin embargo, la marca no ha querido especificar su potencia o el resto de sus especificaciones.
Propiedad de la Future Mobility, Byton sí que ha hecho especial hincapié en la carga tecnológica que tendrá este modelo que según los planes de la marca debería llegar a Europa en 2020 tras comenzar su comercialización en China en 2019. No obstante, el fabricante chino promete que su SUV tendrá sistemas de conducción aútonoma de Nivel 3 para cuando llegue a la línea de producción de la factoría de la marca en Nanjing –China– y que será capaz de alcanzar el Nivel 4 de autonomía posteriormente.
El auto del futuro